LA MUERTE VIENE SILBANDO

Soy un hombre que unicamente cree en la repetición, en los bucles, en los loops.
Muy posiblemente sea algo poco cientifico, pero si un fenómeno se itera sistemáticamente, puedo obtener un conocimiento de él, anticiparle, sacarle provecho en la praxis.
Son ya numerosas las veces que en el Mesón me ha tocado estar y de alguna forma ser testigo de la muerte de pacientes. La primera vez que conocí el albergue, alguien murió.
Algo común que sucede, momentos antes de que fallezcan, y lo he notado la gran mayoria de las ocasiones, es que escucho un silbido fuera de lo ordinario de la noche, un siseo largo, y posterior un silencio brevìsimo interrumpido por el ladrar de perros. Silbido, silencio, perros ladrando. y antes de que llegue la enfermera hasta la recepción se que alguien nos abandonó ya.
Nunca he visto cosas raras, ni sentido cambios en la temperatura, nomás ese silbido raro.
Puede ser por eso que se le represente danzando, aunque creo que muchas veces Ella juega al ajedrez con los pacientes, les permite avanzar y hacer brillantes juegos con torres y alfiles, hasta pareciere que el hombre va ganando; días de mejoría, sonrisas, alegría... súbitamente nos prepara un Jaque Mate.